La comida podría ser considerada una parte de mi vida. No solo la consumo, también la preparo y mi orientación profesional está dirigida a la comida. Tengo muchísimas tentaciones alimenticias, y las ofertas de alimentos atacan los bolsillos más delicados. Para personas como yo, afortunadas por la genética, comer no es un problema, siempre me mantengo en el mismo peso.
Mi problema radica entonces, en que cada comida se convierte en una guerra descarnada, cruel y sin sentido, en la cual cada quien lucha por sobrevivir. Tal cual lo dice Konata-chan en Lucky star “siempre hay que comerse lo que más te gusta primero”. Y tiene razón, ya que siempre, absolutamente siempre, dejo lo que más me gusta al final, y si termino, termino muy llena y me roban lo que guardé con tanto ahínco.
Todo comienza con los entremeses, cuando ves que pasan esas bandejas con deliciosas virtuallas, lanzas la mano para agarrar uno y Voila ¡!!, ya no hay ¡!!. En el afán consumista (y no me refiero a economía), los mejores canapés ya han sido devorados, y solo quedan los canapés desechos, los que han sido tocados, y en el peor de los casos, los que ni relleno traen.
Llega el momento del plato principal: Carnes, cereales y el postre. Cuando llega el momento del postre, soy incapaz de comerme un bocado más, y entonces decido guardar mi porción de postre. Misteriosamente, a la mañana siguiente, mi porción no solo ha desaparecido, sino que del postre original no queda ni rastro ¿Qué ocurre con él? Eso es un misterio que ni Mulder de los X-files, podría solucionar.
Cada año, cada celebración, cada evento con comida de por medio, ocurre lo mismo. ¿Porque no aprendo la lección? ¿Porque guardo lo que más me gusta al final? Tal vez es alguna reminiscencia de las épocas cavernícolas, en la cual los seres humanos acumulábamos comida para soportar largos inviernos (No existían los freezers, claro está). El caso es que , genética o no, produce una gran decepción ver como ese bocado de pastel, que añorabas con ahínco, se desvanece en la boca del (desde ese momento) odiado primo. Robarse el último bocado de los platos ajenos debería ser considerado pecado, ya que provoca ira, avaricia y unas ganas inmensa de asesinar o por lo menos causar el mayor dolor a la persona que te roba lo que más te gusta…
Siendo así, he optado por poner un nuevo propósito a mi vida. Se trata de comerme lo que más me gusta primero, sin importar si de ahora en adelante sobreviviré en base a postres, dulces y leche.
Sin embargo, tendré que dejar las sopas y la mayor parte del plato fuerte, espero que mi madre no salga con las frases preconcebidas: “No desperdicies comida, muchos niños en el mundo no tienen que comer” o “No clasifiques la comida, toda la comida es rica” o “Cómete todo, o no abrá televisión luego”
Me dabato pues entre la culpa (por dejar el resto de comida) y la indignación (por ver como se desaparece mi comida favorita)
Así pues, la pregunta de hoy es… ¿Guardan lo que más les gusta, para el final?
Mi problema radica entonces, en que cada comida se convierte en una guerra descarnada, cruel y sin sentido, en la cual cada quien lucha por sobrevivir. Tal cual lo dice Konata-chan en Lucky star “siempre hay que comerse lo que más te gusta primero”. Y tiene razón, ya que siempre, absolutamente siempre, dejo lo que más me gusta al final, y si termino, termino muy llena y me roban lo que guardé con tanto ahínco.
Todo comienza con los entremeses, cuando ves que pasan esas bandejas con deliciosas virtuallas, lanzas la mano para agarrar uno y Voila ¡!!, ya no hay ¡!!. En el afán consumista (y no me refiero a economía), los mejores canapés ya han sido devorados, y solo quedan los canapés desechos, los que han sido tocados, y en el peor de los casos, los que ni relleno traen.
Llega el momento del plato principal: Carnes, cereales y el postre. Cuando llega el momento del postre, soy incapaz de comerme un bocado más, y entonces decido guardar mi porción de postre. Misteriosamente, a la mañana siguiente, mi porción no solo ha desaparecido, sino que del postre original no queda ni rastro ¿Qué ocurre con él? Eso es un misterio que ni Mulder de los X-files, podría solucionar.
Cada año, cada celebración, cada evento con comida de por medio, ocurre lo mismo. ¿Porque no aprendo la lección? ¿Porque guardo lo que más me gusta al final? Tal vez es alguna reminiscencia de las épocas cavernícolas, en la cual los seres humanos acumulábamos comida para soportar largos inviernos (No existían los freezers, claro está). El caso es que , genética o no, produce una gran decepción ver como ese bocado de pastel, que añorabas con ahínco, se desvanece en la boca del (desde ese momento) odiado primo. Robarse el último bocado de los platos ajenos debería ser considerado pecado, ya que provoca ira, avaricia y unas ganas inmensa de asesinar o por lo menos causar el mayor dolor a la persona que te roba lo que más te gusta…
Siendo así, he optado por poner un nuevo propósito a mi vida. Se trata de comerme lo que más me gusta primero, sin importar si de ahora en adelante sobreviviré en base a postres, dulces y leche.
Sin embargo, tendré que dejar las sopas y la mayor parte del plato fuerte, espero que mi madre no salga con las frases preconcebidas: “No desperdicies comida, muchos niños en el mundo no tienen que comer” o “No clasifiques la comida, toda la comida es rica” o “Cómete todo, o no abrá televisión luego”
Me dabato pues entre la culpa (por dejar el resto de comida) y la indignación (por ver como se desaparece mi comida favorita)
Así pues, la pregunta de hoy es… ¿Guardan lo que más les gusta, para el final?
Hasta la próxima ^_^
3 comentarios:
¡Comer es un placer! :D
Yo casi no como postres inmediatamente después de la comida, a veces como algo dulce a media tarde. Sí me ha pasado que lo que guardo, incluso lo que me regalan de dulces, desaparece sin dejar rastros... :( es triste, realmente, jaja.
Lo que se me ocurre es que puedes comer un poco menos de lo que no te gusta tanto para así poderte comer lo que te gusta más, y no tener que guardarlo y ver luego a tu primo malvado comiéndoselo :D
A mí me gustaría aprender a cocinar bien, pero me di cuenta de que apesto totalmente en eso.
Un besote!!
Yo, los guardo para despues, porque como diria, antes se come lo peor y despues lo mejor, porque sino, despues te queda ese mal gusto de la comida, y no ese buen olor a helado o a , almenos, una fruta exotica. No eres la unica a quienes les roban los postres a la maniana siguiente xD. Ahun que lo hago, ( los cazapostres) me da furia cuando, ensima de eso, advierto: apenas lo tocan, y lo lamentaran! y no es solo porque no me entra mas (ni un bocado), lo guardo para poder disfrutarlo despues como un ninio de 5 anios quien disfruta su chupetin (lolipop).
Gracias por dejarme comentar, me gusta tu sitio, porque las reflecciones son tan reales.
Hasta luego = )
OPUTAkU:TARADAAAAAAAAAA.. TU CULO ES EL MAS FACIL DEL OESTE!! Y SI SOS MEDIA PELOTUDA, SIEMPRE LO FUISTE, TE CONOSCO DESDE LOS 5 EN LA PRIMARIA, ERAS UNA TARADA. NO SE COMO EL PARROCO DE TURNO NO TE EXPULSO POR ESTUPIDA.. EL MANOSEABA PIBES PERO VOS TE SALVABAS POR LIMITADA Y MEDIO "RARITA". ME VOY PQ' SE ME VA EL TREN.. TE DEJO CON TU ESTUPIDEZ. TE DIGO Y TE REPITO.. SOY EL BATO DE CHACARITA.. CARLOS ES MI FIEL SABELO, Y SABELLA.
p.D.: LLAMAME !! QUE NO SE CORTE!!
bESOS GORDI!!
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